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Archivo mensual: diciembre 2013
Pulchrum transcendentale
Creen algunos que la belleza es, junto a la unidad, la verdad o la bondad, una propiedad trascendental del ente. Para otros esta creencia carece de fundamento. Aquellos tienen a suprimir toda referencia al placer en la definición de lo bello, por lo que ponen en duda o trata de modificar la referencia de Tomas en Summa theologiae, I, 95, 9, 5, ad 1: “se llaman bellas las cosas que una vez vistas producen agrado”. Estos, por el contrario, no toleran tal supresión y deducen que lo mismo que la verdad se da en la relación de lo real al entendimiento, así se da el agrado en relación a la voluntad, por lo que éste es nota esencial de la belleza. Dado que todo bien ya es de suyo deleitable, concluyen, no es oportuno añadir la belleza a la serie de los trascendentales una vez que entre éstos se cuenta ya el bien.