-
Archivo
- agosto 2025
- julio 2025
- junio 2025
- mayo 2025
- abril 2025
- marzo 2025
- febrero 2025
- noviembre 2024
- agosto 2024
- junio 2024
- mayo 2024
- abril 2024
- febrero 2024
- agosto 2023
- julio 2023
- junio 2023
- mayo 2023
- abril 2023
- marzo 2023
- febrero 2023
- enero 2023
- diciembre 2022
- noviembre 2022
- octubre 2022
- septiembre 2022
- agosto 2022
- julio 2022
- junio 2022
- mayo 2022
- abril 2022
- marzo 2022
- febrero 2022
- enero 2022
- diciembre 2021
- noviembre 2021
- octubre 2021
- septiembre 2021
- agosto 2021
- julio 2021
- junio 2021
- mayo 2021
- abril 2021
- marzo 2021
- enero 2021
- diciembre 2020
- noviembre 2020
- octubre 2020
- septiembre 2020
- julio 2019
- junio 2019
- mayo 2019
- marzo 2019
- febrero 2019
- diciembre 2018
- noviembre 2018
- octubre 2017
- septiembre 2017
- agosto 2017
- mayo 2017
- abril 2017
- marzo 2017
- febrero 2017
- febrero 2016
- diciembre 2015
- noviembre 2015
- septiembre 2015
- junio 2015
- enero 2015
- diciembre 2014
- noviembre 2014
- septiembre 2014
- agosto 2014
- julio 2014
- junio 2014
- mayo 2014
- abril 2014
- marzo 2014
- diciembre 2013
- julio 2013
- junio 2013
- mayo 2013
- marzo 2013
- enero 2013
- diciembre 2012
- noviembre 2012
- octubre 2012
- septiembre 2012
- agosto 2012
- julio 2012
- junio 2012
- mayo 2012
- abril 2012
- marzo 2012
- febrero 2012
- enero 2012
- diciembre 2011
- noviembre 2011
- octubre 2011
- septiembre 2011
- agosto 2011
- julio 2011
-
Meta
Archivo mensual: enero 2012
Tomás de Aquino y Locke
Según John Locke, cuya vida transcurrió en el siglo XVII, a cuatrocientos años de distancia de la de Santo Tomás, no existe mejor posición moral que la de éste para justificar el derecho a derrocar a un tirano.
Aunque Tomás de Aquino está convencido de que la pertenencia a una comunidad reside en la naturaleza humana y no puede haber, en consecuencia, una vida extrasocial de los hombres y un pacto posterior entre ellos para empezar a obedecer a un gobierno, anticipó la teoría de Locke que liga las obligaciones del gobierno civil a los derechos de los hombres en estado natural.
Sigue leyendo
Publicado en Filosofía práctica, Política
Comentarios desactivados en Tomás de Aquino y Locke
Ley natural y ley divina
La ley natural, decía en el artículo anterior, comprende las inclinaciones a vivir, a procrear, cuidar y educar a los hijos, ensanchar la inteligencia y vivir en sociedad, y ordena que esas inclinaciones tengan el mejor desarrollo posible. Fácil es deducir que una sociedad en que haya universidades, como era la sociedad medieval, que las había fundado por primera vez, comenzando quizá por la de Bolonia el año 1088, cumple mejor la exigencia de desarrollar la inteligencia y es por tanto más humana y racional que una que no las tenga.
La tercera ley es, según Tomás de Aquino, la divina, a la que no alcanza la razón humana, pues es conocida solo por la revelación de Dios a los hombres en las Escrituras y la Iglesia. Esta ley es un don debido a la gracia divina.
Sigue leyendo
Publicado en Filosofía práctica, Política
Comentarios desactivados en Ley natural y ley divina
Ley eterna y ley natural
// < ![CDATA[
(function(i,s,o,g,r,a,m){i[‘GoogleAnalyticsObject’]=r;i[r]=i[r]||function(){ (i[r].q=i[r].q||[]).push(arguments)},i[r].l=1*new Date();a=s.createElement(o), m=s.getElementsByTagName(o)[0];a.async=1;a.src=g;m.parentNode.insertBefore(a,m) })(window,document,’script’,’//www.google-analytics.com/analytics.js’,’ga’); ga(‘create’, ‘UA-25183444-1’, ‘auto’); ga(‘send’, ‘pageview’);
Sigue leyendo
Publicado en Filosofía práctica, Política
Comentarios desactivados en Ley eterna y ley natural
Santo Tomás de Aquino
Las obras de Aristóteles no fueron bien recibidas por la cristiandad medieval. Transmitidas a través de árabes y judíos, traían el sello de la infidelidad religiosa. De hecho la Universidad de París prohibió su lectura en 1210. Más tarde hubo algunas otras prohibiciones, si bien apenas tuvieron seguimiento.
Pese a todo, el extraordinario vigor filosófico y teológico del cristianismo medieval se mostró menos en la superación de esos obstáculos que en la admirable reinterpretación de Aristóteles, una empresa que corrió a cargo de dos dominicos: San Alberto Magno y su alumno Santo Tomás de Aquino.
Sigue leyendo
Publicado en Filosofía práctica, Política
Comentarios desactivados en Santo Tomás de Aquino
Claudio Adrián Helvecio
Claudio Adrián Helvecio, nacido el 26 de enero de 1715, un ilustrado francés que estudió en un colegio de jesuitas, siguió luego la doctrina de Locke y pasa por ser, junto a Condillac, uno de los máximo promotores del materialismo en Francia, escribió De l’Esprit, una obra precursora de la actual educación para la ciudadanía.
Los hombres solo se hacen buenos si tienen buenas leyes, dice Helvecio. El arte del legislador consiste en hacer que sean justos unos con otros por el amor a sí mismos. Éste es el sentimiento principal, único, que anida en su corazón y mueve sus acciones. La naturaleza ha grabado en ellos de forma indeleble la preferencia por sí mismos, de donde deriva que aborrezcan el dolor y amen el placer. De ahí vienen todas sus virtudes y todos sus vicios.
Sigue leyendo
Publicado en Filosofía práctica, Política
Comentarios desactivados en Claudio Adrián Helvecio
Las Navas de Tolosa
La Parte Segunda -Edad Media-, Libro Primero, Capítulo XII, de la magna obra Historia General de España, de Don Modesto Lafuente, narra el episodio de la batalla habida en las Navas de Tolosa entre un ejército de cristianos venidos … Sigue leyendo
Comentarios desactivados en Las Navas de Tolosa
La memoria histórica
A nadie debería ocultársele ya que la locución “memoria histórica” es un señuelo ideológico, una parte del conjunto de imágenes y conceptos que un sector de la sociedad elabora con el fin de combatir a otros sectores. Ese fue el sentido que Marx dio a la palabra “ideología”.
Que la historia tiene que ver con la memoria fue una ocurrencia banal de Francis Bacon en el siglo XVII. Bacon clasificó las ciencias por las facultades psicológicas de las que, según él, dependen: la filosofía y las matemáticas de la razón, la literatura de la imaginación y la historia de la memoria. Esta clasificación fue seguida en el siglo XVIII por D’Alembert en su Discurso preliminar de la Enciclopedia y hoy puede decirse que es un rasgo esencial del progresismo español.
Sigue leyendo
Publicado en Filosofía práctica, Política
Comentarios desactivados en La memoria histórica
Defensa del tiranicidio
En el capítulo sexto de su magna obra De rege et regis institutione, Juan de Mariana muestra el carácter de los antiguos republicanos romanos que amaban su libertad y su patria por encima de todo, estando dispuestos a liquidar al … Sigue leyendo
Comentarios desactivados en Defensa del tiranicidio
De la moneda
Famoso texto de Juan de Mariana, en donde se expresan ideas ampliamente tratadas por él mismo en De mutatione monetae. Este capítulo "VIII. De la moneda" procede de su obra titulada Del rey y de la institución real, "obra quemada … Sigue leyendo
Comentarios desactivados en De la moneda
El canónigo Pierre Gassendi
Nacido el 22 de enero de 1592, Pierre Gassendi era un hombre de religión –fue canónigo en Digne, en el Departamento de Alpes de Alta Provenza- que, recorriendo la senda de Epicuro, fue a parar a Demócrito. Además de sus deberes religiosos se imponía otros, como asistir a disecciones y hacer observaciones astronómicas. Seguidor de la moral de Epicuro, que se esforzó en rehabilitar, tuvo amigos libertinos, a los que censuró por sus excesos apoyándose precisamente en el hedonismo epicúreo.
No desconfió tanto como Mersenne, a quien le unía una amistad bien cuidada, de las afirmaciones dogmáticas. Mersenne no se decidió entre la idea de una materia sutil que se expande por todo el universo y la del vacío habitado por átomos moviéndose dentro de él. Gassendi, en su lucha con Aristóteles, defendió la moral epicúrea del equilibrio interno y el control de los deseos y, al querer dilucidar lo que es incompatible con el cristianismo y lo que no, se deslizó de manera consciente hacia el atomismo de Demócrito.
Sigue leyendo
Publicado en Filosofías de (genitivas)
Comentarios desactivados en El canónigo Pierre Gassendi
Francis Bacon, Barón de Verulam
Lo propio del filósofo es, dice Platón, averiguar qué cosas van juntas pareciendo que deben estar separadas y qué otras van separadas pareciendo que están juntas.
Si se toma este criterio como medida del buen filósofo habrá que pensar que Sir Francis Bacon, Primer Barón de Verulamio y Bizconde de St Albans, nacido el día 22 de enero de 1561, debió ser uno de los mejores, en razón de las similitudes que supo hallar en cierta investigación sobre la “forma” o “naturaleza” del calor. La pimienta, los rayos del Sol y las plumas del cisne iban juntos en una tabla de presencias. La tabla de ausencias agrupaba en la misma categoría la luciérnaga y los rayos de la Luna. Una última tabla en que constaban los cuerpos cuyo calor varía según grados incluía los cadáveres, el estiércol del caballo y los golpes del martillo sobre el yunque.
Sigue leyendo
Publicado en Filosofías de (genitivas)
Comentarios desactivados en Francis Bacon, Barón de Verulam
España, imperio civilizador
La acción de España en las tierras del Nuevo Mundo que descubrió, exploró y conquistó no fue la de un imperio depredador, como la de Holanda o Alemania, sino la de uno civilizador. Así lo ha defendido Gustavo Buen con palabras memorables y así ha sido la conciencia que siempre han tenido los españoles. He aquí una extraordinaria referencia, producida cuando la Corona de España cayó en manos de Napoleón y los españoles organizaron su defensa creando Juntas de Defensa. La Central emitió un decreto el 22 de enero de 1809 que es citado por Don Modesto Lafuente en la Parte Tercera –Edad Moderna, Dominación de la Casa de Borbón-, Libro Décimo, Capítulo VI, Tomo 17, de su monumental obra Historia General de España, en los términos siguientes:
Porque una de las mayores y más favorables novedades que en este tiempo ocurrieron fué haber resonado el grito de indignación lanzado por España con motivo de la invasión francesa y los sucesos de Bayona en todas las vastas posesiones españolas de allende los mares, y haberse difundido el mismo espíritu y pronunciádose con la misma decisión y entusiasmo contra la dominación extranjera en España nuestros hermanos de ambas Américas españolas, y cundido hasta las extensas y remotas islas Filipinas y Marianas, comprometiéndose sucesivamente á ayudar con todo esfuerzo nuestra causa, y á no reconocer otro soberano que á Fernando VII y á los legítimos descendientes de su dinastía, llegando el fervor excitado en las Antillas al extremo de recuperar para España la parte de la isla de Santo Domingo cedida á Francia por tratados anteriores. Este sentimiento de adhesión á la causa de la metrópoli no fué de pura simpatía, sino que se tradujo en actos positivos, apresurándose á socorrerla con cuantiosos dones, no sólo los españoles allí residentes, sino los oriundos de éstos nacidos en América. La Junta Central correspondió á estas demostraciones con el memorable decreto de 22 de enero de 1809 expedido en el palacio real del Alcázar de Sevilla, en que hacía la siguiente importantísima declaración: «Considerando que los vastos y preciosos dominios que España posee en las Indias no son propiamente colonias ó factorías como los de otras naciones, sino una parte esencial ó integrante de la monarquía española; y deseando estrechar de un modo indisoluble los sagrados vínculos que unen á unos y otros dominios, como asimismo corresponder á la heroica lealtad y patriotismo de que acaban de dar tan decidida prueba á España… se ha servido S. M. declarar, que los reinos, provincias é islas que forman los referidos dominios, deben tener representación nacional é inmediata de su real persona, y constituir parte de la Junta Central gubernativa del reino por medio de sus correspondientes diputados.» En cuya virtud prescribía á los virreinatos y capitanías generales de Nueva España, Perú, Nueva Granada, Buenos-Aires, Cuba, Puerto-Paco, Guatemala, Chile, Venezuela y Filipinas, procediesen al nombramiento de sus respectivos representantes cerca de la Junta. Novedad grande, cuyas consecuencias nos irá diciendo la historia. Sigue leyendo
Publicado en Filosofías de (genitivas)
Comentarios desactivados en España, imperio civilizador
Testamento y muerte de Isabel la Católica
Isabel de Castilla fue una reina admirable y una mujer no menos admirable. De ello da fe el final de su vida y el testamento que dictó poco antes de que éste llegara. Se leerá con provecho el comentario que … Sigue leyendo
Comentarios desactivados en Testamento y muerte de Isabel la Católica
Augusto Comte
La filosofía de Auguste Comte, nacido el día 19 de enero de 1798, llevó hasta su culminación la confusa idea roussoniana de la voluntad general, una idea de algo inexistente que hoy ha resucitado en la noción de cultura como una sustancia incorpórea que vive por encima de los individuos, les da el ser y tiene sus propios rasgos independientes de los de ellos. En Comte era el concepto de sociedad, una entidad que, según él, supera los fines individuales.
Esta concepción había sido antes de él una reacción contra la Revolución Francesa, cuyo programa individualista y atomizador ha mostrado Gustavo Bueno en un libro de lectura obligada (El mito de la izquierda, Ediciones B., Barcelona, 2003), fue discutido por filósofos tradicionalistas católicos como Bonald y De Maistre. La filosofía social de Hegel, que fue puesta al día por Marx y sus seguidores, se encuadra en esta misma tendencia.
Sigue leyendo
Publicado en Filosofías de (genitivas)
Comentarios desactivados en Augusto Comte
Cristianismo primitivo
Para muchos teólogos protestantes el cristianismo tiene una esencia inmutable. La mayoría de los teólogos católicos, por el contrario, comprenden que es un ser vivo sujeto a permanente transformación. Puede decirse que la propia Iglesia “oficial” participa de esta concepción de forma muy efectiva. Así lo muestra la historia de los concilios. No ha existido nada comparable. La ciencia, la filosofía, el arte, la política, etc., no han exhibido tanta prudencia y tanta finura en la elaboración de sus ideas. La confrontación con grandes heresiarcas como Arrio, Nestorio, Eutiques, Focio, Lutero, etc., la obligación que siempre se ha impuesto de examinar hasta la última coma de sus escritos y sus actos para comprender qué podía aceptarse y qué rechazarse han hecho de ella una institución única. Bien deben saberlo sus altas jerarquías cuando el cardenal Ratzinger ha dejado dicho que los herejes han sido piedra angular de la Iglesia.
Un asunto que siempre ha sido fuente de graves preocupaciones es el de la propiedad y la riqueza. Todos pensarán quizá que el Evangelio antepone el ascetismo a cualquier otra consideración, pero no es del todo correcto. Hay muchos pasajes en que la vida se vive con alegría, se come y se bebe con satisfacción, si bien no con desenfreno ni intemperancia, y, desde luego, no se detestan los bienes de este mundo. Jesús no se pronuncia en ningún momento en contra del sistema económico de propiedad de Roma o de Israel y no dice que sea necesaria su transformación.
Sigue leyendo
Publicado en Filosofías de (genitivas), Religión
Comentarios desactivados en Cristianismo primitivo
El barón de Montesquieu
Carlos Luis de Secondat, Señor de la Brède y Barón de Montesquieu, de cuyo nacimiento se cumplen hoy trescientos veintitrés años, es uno de los escritores que ha contribuido de manera más eficaz a extender la leyenda negra de España. Lo extraordinario de su caso es que, tratándose de una persona de gran inteligencia y saber en materia de historia y política, tenga la peor ignorancia que alguien puede padecer, que es la del que no quiere saber algo porque cree saberlo ya.
Nunca se molestó en visitar España cuando tuvo que hablar de ella, pese a que su castillo de la Brède estaba muy cerca, no conocía nada o casi nada de lo que aquí se escribía, pero lo despreciaba. Un coronel español le habló una vez de la obra ilustrada y crítica de Feijoo y apenas tuvo paciencia para acabar de escucharle. “El único libro buen libro que tienen es uno que hace ver cuán ridículos son todos los demás”.
Sigue leyendo
Publicado en Filosofías de (genitivas)
Comentarios desactivados en El barón de Montesquieu
Discurso a los electores de Bristol
Discurso de Burke a sus electores de Bristol en que aparece nítidamente expresada la convicción de que el diputado no debe estar sujeto a mandato imperativo de los votantes. Así lo reconoce actualmente la Constitución Española de 1978 en su … Sigue leyendo
Comentarios desactivados en Discurso a los electores de Bristol
Iglesia y cristianismo
La iglesia y la religión son también instituciones mundanas y en cuanto tales reciben influjos de otras instituciones y otras creencias, a la vez que influyen sobre ellas. Ambas, religión e iglesia, han adoptado a lo largo de la historia una serie de actitudes, no siempre congruentes entre sí, acerca de lo que los hombres deben ser y hacer. Si no mantuvieran viva la llama de la moral se encerrarían y agostarían en el molde estrecho de las normas rituales.
Esto último es lo que ha sucedido al islam y al judaísmo, dos grandes religiones que en su tiempo fueron vivas y fecundas. Pero la segunda es ahora todavía la religión del Talmud y sus teólogos fueron estrellas apagadas hace más de mil años. Y el impulso que mueve a la primera es más el rechazo de lo ajeno, que no acaba de incorporar a su ser, que una fuerza que procediera de su interior. Esa fuerza se agotó algo más tarde que la del judaísmo. Podría ponérsele una fecha: el año 1195, cuando el califa Yaqub al Mansur cedió a las presiones de los que veían las ciencias profanas, sobre todo la filosofía, como un peligro para la religión, publicó un decreto contra los que se dedicaban a ellas y confinó en la cárcel de Lucena a Averroes, que antes había padecido la suerte de ver cómo se quemaban sus libros en público y se le expulsaba de la mezquita por la acción de un populacho fanatizado.
Sigue leyendo
Publicado en Filosofías de (genitivas), Religión
Comentarios desactivados en Iglesia y cristianismo
Edmund Burke
Edmund Burke, nacido en Dublín el 12 de enero de 1729, aceptó la demolición del derecho natural llevada a cabo por David Hume. La naturaleza del hombre es el artificio para él. Las instituciones políticas de una sociedad no proceden de un pacto entre individuos, lo que no sería más que una ficción histórica, sino que se han ido formando en la historia y la historia las ha santificado.
La constitución, la monarquía, los jueces, la nación en suma, son algo que no se entiende como una asociación voluntaria de individuos ni como una decisión de todos ellos, sino como el resultado de circunstancias, hábitos civiles y morales, etc., que tienen continuidad en el tiempo. El individuo y la multitud son estúpidos, pero no la especie, que es prudente y obra siempre bien cuando se le da tiempo.
Sigue leyendo
Publicado en Filosofía práctica, Política
Comentarios desactivados en Edmund Burke
El impuesto destructor
Los impuestos pueden tener un fin recaudatorio, pero también pueden tener otros fines y en muchas ocasiones no es fácil distinguirlos. El anterior gobierno del PSOE gravó las bebidas alcohólicas y el tabaco buscando incrementar la recaudación. Si en lugar de ello hubiera buscado la supresión de ese consumo, lo que habría seguido más de cerca su intención de cuidar nuestra salud más incluso que nosotros mismos, tendría que haber elevado la imposición mucho más, hasta lograr disuadir a la gente.
Si lo hubiera hecho habrían disminuido las ventas, se habría paralizado la producción y al final el consumo de alcohol y tabaco habría dejado de generar impuestos. El final habría sido el mismo si los consumidores hubieran decidido obtenerlos por medio de la producción ilegal y el contrabando. Todo el mundo sabe lo que sucedió en Chicago a principios del siglo pasado.
Sigue leyendo
Publicado en Economía, Filosofía práctica
Comentarios desactivados en El impuesto destructor
El impuesto progresivo
Dicen Marx y Engels en El manifiesto del partido comunista que una vez que la revolución obrera haya tomado el poder para el proletariado habrá que ir despojando poco a poco a la burguesía "de todo el capital, de todos los instrumentos de la producción, centralizándolos en manos del Estado”, cosa que solo podrá hacerse al principio “mediante una acción despótica sobre la propiedad y el régimen burgués de producción”.
Las medidas que habrá que tomar, agregan, serán un resorte propulsor imprescindible para transformar el régimen económico de mercado en una economía comunista. De las diez que enuncian, aplicables con mayor o menor intensidad según el país de que se trate, la segunda es “un fuerte impuesto progresivo”. Otras que vale la pena mencionar son la expropiación de la propiedad inmueble, la supresión del derecho de herencia, la centralización del crédito en el Estado y la nacionalización de los transportes. Todas ellas se enderezan a la liquidación de la propiedad privada.
Sigue leyendo
Publicado en Economía, Filosofía práctica
Comentarios desactivados en El impuesto progresivo
Samuel von Pufendorf
El barón Samuel von Pufendorf, nacido el 8 de enero de 1632, fue jurista, economista, hombre de estado, historiador y filósofo político. En esta última faceta de su personalidad contribuyó a la gestación y desarrollo del derecho natural en la Edad Moderna.
La filosofía política empezó a separarse de la teología a principios del siglo XVII. Con ello tuvo que ver el que las disputas religiosas pasaran a un segundo plano, el que las ciencias geométrico-materialistas estuvieran alcanzando un notable éxito en la explicación de la naturaleza física y, sobre todo, el que la vuelta al estoicismo, al platonismo y al aristotelismo, propiciada esta última por la gran obra de Santo Tomás de Aquin en el siglo XIII, inculcaran en las mentes una gran dosis de racionalismo y naturalismo. Como consecuencia de todo ello, las organizaciones políticas se empezaron a ver también como fenómenos naturales accesibles a la observación y al razonamiento lógico.
Sigue leyendo
Publicado en Filosofía práctica, Política
Comentarios desactivados en Samuel von Pufendorf